Pastel de calabacín y requesón. #Asaltablogs

El último domingo de cada mes nos damos cita los chorizos más despiadados de la red, los #asaltablogs. Entramos sin piedad en la cocina asaltada y no dejamos títere con cabeza.

Este mes hemos desvalijado la cocina de  El mito del sofrito y yo le he mangado una receta que antes ella había mangado a otra infeliz, total que quien roba a un ladrón.... tiene cien años de perdón. Esta vez me he librado del calabozo.

En casa nos encantan los pasteles salados tipo quiché, cuando vi este pastel de calabacín con requesón no lo dude, ese sería mi botín.

He cambiado algunos de los ingredientes adaptandolos a nuestros gustos y a lo que tenía en casa. He sustituido la masa de hojaldre por masa quebrada y el rulo de cabra por queso brie, también he incorporado a la receta un huevo más y además le he puesto menos cantidad de leche, también le he añadido un poquito de cebolla. La he tuneado un poco, pero la esencia de la receta es la misma.

El molde que he usado es de silicona con aro desmoldable, de 23 cm de diámetro por lo que sale un pastel finito. Si lo hacéis en un molde más pequeño os saldrá un pastel mas grueso.

Es ideal como primer plato o para tomar como plato único en la cena.

Ingredientes:

1 lámina de masa quebrada
80 gr de queso brie
400 gr de requesón
4 huevos tamaño L
70 ml de leche entera
300 gr de calabacín 
25 gr de piñones
sal 
pimienta
aceite de oliva
un poco de mantequilla para el molde

Elaboración:

Lavar y pelar los calabacines.Cortar en trozos.

Picar la cebolla en trozos medianos y sofreír en una sartén con aceite de oliva junto con el calabacín. Cuando esté listo retirar el exceso de aceite y reservar.

Precalentar el horno a 180 Cº, calor arriba y abajo.

En un bol mediano batimos los huevos y añadimos el requesón, el queso brie en trocitos, la leche, un poquito de sal y pimienta al gusto. Batimos con las varillas de mano.

Engrasar el molde con mantequilla. Forrar con  la masa quebrada la base y los bordes del molde. Pinchar la base con un tenedor.

Verter los calabacines con la cebolla que teniamos reservado por toda la superficie. Verter encima lo que teniamos en el bol.

Introducir en la zona central del horno durante unos 35 minutos, que veamos que los bordes han comenzado a dorarse. Abrir el horno y con cuidado esparcir los piñones por toda la superficie y hornear unos 10 minutos más, vigilando que no se nos quemen los piñones y que el pastel está cuajado, para ello introducir un palito en el centro.

Sacar del horno y dejar reposar sobre una rejilla.

Desmoldar y servir templado, aunque frío también está rico!

Espero que os haya gustado mi asalto!!!

Un beso.