Esta tarta es ideal para el verano porque no necesita horno y, además es muy refrescante.
Hay que hacerla la víspera para que cuaje.
Se puede utilizar gelatina de limón o de piña y, para la base bizcochos de soletilla, sobaos , magdalenas...lo que tengáis en casa.
Ingredientes:
1 bote grande de piña en su jugo (unas 8 rodajas)
400 ml de nata liquida
1 sobre de gelatina de limón o de piña
Alrededor de 12 bizcochos de soletilla
Caramelo líquido
Preparación:
Caramelizamos el fondo del molde que vayamos a utilizar.
Colocamos las rodajas de la piña sobre el fondo caramelizado. El jugo lo reservamos y, antes de colocar la piña la escurrimos bien.
A mi me sobraron dos rodajas, las corté en trocitos y las reserve.
En un cazo ponemos a calentar, sin que llegue a hervir, el liquido de la piña, la nata y el sobre de gelatina. Cuando veamos que está bien disuelto le incorporamos la piña que os haya sobrado y lo trituráis con la batidora.
Volcamos esta mezcla en el molde.
Seguidamente y sin dejar que se enfríe, cubrimos toda la superficie con los bizcochos de soletilla, nos ayudaremos de un tenedor para que se empapen bien y luego no nos queden secos.
Dejamos que se enfríe, tapamos con film transparente y lo guardamos en la nevera para que cuaje.
Como ya dije es mejor hacerlo el día anterior para asegurarnos que está bien cuajado.
Desmoldamos sobre una fuente en el momento de servir. Se puede adornar con guindas colocadas en el centro de las rodajas de la piña
Tiene muy buena pinta. Que riiico. Plis avisa cada vez que tenfas una nueva receta.
ResponderEliminarQue pinta tiene !!!! me la apunto y dentro de unos días cae en casa
ResponderEliminarGracias por tus recetas.Un abrazo