Bizcochitos de Aprovechamiento

Lo de tirar comida no va conmigo, yo voy guardando restos en mis tupper y luego les encuentro alguna salida.De tirarlos ya habrá tiempo!. 

Que hago carne con salsa y se me va la mano , pues congelo la salsa . Que me sobra jibia, calamares en salsa, los congelo y luego los uso para la paella.....Los restos siempre tienen salida, en pizzas, tortillas....

Pero esta vez tenía la nevera llena de restos de nata, buttermilk,hasta del frosting de nubes que use para los Whoppie . Mira que me ha dado de sí ese frosting, los he usado para tres recetas!!! Y es que está tan bueno que daban ganas de coger una cuchara y terminar con él de una vez. 

Definitivamente, lo que hace de especial esta receta es el frosting de nubes. Ya sé que el frosting es para poner por encima, no dentro, pero tengo que reconocer, que me empalaga un poco tanto frosting en los cupcakes y bizcochos, a mi me gustan las cosas más sencillas. Y es que luego no le saco el gusto a la masa!!!. Por eso no me gusta el fondant, soy incapaz de tomarme algo tan dulce, me gusta lo que esconde debajo,je,je...

Pues con esos restos he hecho estos bizcochitos que han salido de escándalo. Es un poco difícil que vuelva a repetirlos exactamente con esos ingredientes ,pero se pueden adaptar las medidas y usar lo que tengáis en ese momento por la nevera. Moraleja: que no hay que tirar nada!!

Y os dejo la receta de mi invento

Ingredientes:

3 huevos grandes
180 gr de azúcar blanquilla
120 ml de buttermilk
80 gr de frosting de fresitas de nube
60 ml de aceite de girasol
200 gr de harina
1 sobre de levadura
1 cucharadita de extracto de vainilla

Preparación:

Precalentar el horno a 180 grados

Batir los huevos y añadir el azúcar hasta que esté bien mezclado.

Incorporar el buttermilk y mezclar.

Añadir el froting , la vainilla y el aceite de girasol y batir hasta que estén bien incorporados.

Por último añadir la harina tamizada con la levadura.

Volcar en los moldes elegidos o en un único molde previamente engrasado sí no es de silicona.

A petición de mi hija Carmen, chocolatera cien por cien, añadimos a dos moldes unas perlitas de chocolate antes de introducirlos en el horno.

Cuando la masa crece no queda ni rastro de las perlitas de chocolate, se distribuyen por toda la masa, aunque alguna se va al fondo.

Introducir al horno durante 25 minutos o hasta que al pincharlo con una brocheta esta salga limpia.

Adornar al gusto.

Espero que os guste!!!!